Federación Española de Asociaciones de Viviendas y Apartamentos Turísticos
Observatorio de la vivienda turística en España 2022
El proyecto Observatorio de la vivienda turística en España 2022 impulsado por la Federación Española de Asociaciones de Viviendas Turísticas (FEVITUR), y llevado a cabo por el Instituto Multidisciplinar de la Empresa de la Universidad de Salamanca, tiene como principal objetivo disponer de una radiografía del usuario de viviendas de uso turístico (VUT) en España a lo largo del año 2022. Este informe nace del deseo de sus promotores de aportar información objetiva y transparente sobre el uso de la vivienda de alquiler vacacional en España, uno de los sectores turísticos más competitivos y que explica una parte importante del PIB en España. Y lo hace siguiendo el trabajo iniciado por Vrbo durante seis ediciones con el Barómetro del Alquiler Vacacional en España, el último llevado a cabo en 2019 y con el que este trabajo realiza la comparativa.
El informe se ha realizado a través de una muestra seleccionada de personas de entre 18 y 74 años residentes en España y que han pernoctado en el último año, al menos una vez, en una vivienda turística. Para el estudio se ha realizado una entrevista autoadministrada por correo electrónico durante 17 días.
Empezaron la encuesta 17.632 personas, a las que se les preguntó por el tipo de alojamiento y las comunidades autónomas de destino, dos cuestiones que sirvieron de filtraje de la muestra. Finalmente, se obtuvieron 1.889 cuestionarios completos que sirvieron de base para obtener las muestras aleatorias para la realización del informe.
La muestra definitiva la configuran 1.100 personas, de las cuales el 55,7% son mujeres, con una mayor representación en el grupo de edad de 25 a 34 años (23%).
Uso y fidelización de las VUT
Los datos del Observatorio de la Vivienda Turística en España 2022 revelan que el 31,8% de los viajeros españoles se alojaron en una VUT. La cifra está casi 9 puntos por encima de los datos recogidos en 2019, cuando solamente un 23% de los viajeros optaron por esta tipología de alojamiento.
Además, en el 41,6% de los casos, los viajeros admiten que en la búsqueda de alojamiento solo exploraron el mercado de las VUT, dejando al margen otras modalidades de alojamiento. Otro 50,6% también acabaron decidiendo alojarse en una VUT después de comparar la oferta con la oferta hotelera.
Analizando los datos por tramos de edad, la alta preferencia por las VUT es más predominante entre los mayores de 64 años. Un 62,37% de los clientes entre 65 y 74 años solo buscaron VUT para alojarse en sus vacaciones. Un dato que confirma el perfil familiar de este tipo de alojamiento.
Según estos mismos datos, cada viajero ha contratado una VUT 2,6 veces en el último año. Una cifra que ha incrementado sustancialmente ya que en 2019 esta cifra estaba en 1,26 veces.
Los datos demuestran en su conjunto el alto grado de competitividad y fidelización del sector. De hecho, para este 2023 el 84,4% de los viajeros tiene intención de alojarse en una VUT durante sus vacaciones y escapadas. Esta cifra estaba hace tan solo tres años más de 12 puntos por debajo. En 2019 hicieron esta declaración de intenciones el 71,8% de los viajeros.
La gran mayoría de encuestados (56,2%) utilizó la VUT en el período comprendido entre mayo y agosto, coincidiendo con los meses de verano, pero un 24,5% se alojaron entre septiembre y noviembre de 2022.
Perfil de cliente y motivaciones
En 2022, la reserva media en VUT fue de 5,5 noches y para 3,9 personas. Una media ligeramente superior a la de 2019 (5,28). Según los datos del Observatorio de la Vivienda Turística en España, la mayoría de los clientes son familias y parejas (74,6%), seguidos de los grupos de amigos (20,4%).
En relación con las motivaciones para viajar, la playa (24,7%), la cultura (22,2%) y la naturaleza (19,4%) han sido los principales reclamos. Aunque tampoco podemos olvidar los viajes motivados por las visitas familiares (11,7%), la participación en actividades deportivas y musicales (8,55%) o el disfrute de la gastronomía de nuestro país (7,0%), entre otros. En este sentido, sin embargo, el estudio recoge un dato interesante. Pese a no tratarse de viajes de negocios, en un 11,0% de las estancias, los viajeros han aprovechado sus vacaciones y escapadas también para teletrabajar.
En el momento de escoger el alojamiento, la ubicación y el precio son los factores más predominantes. En el caso de la ubicación, se trata de un factor decisivo para los viajeros de entre 35 y 44 años. Y en general la preferencia es encontrar alojamiento en el centro de la ciudad (56,3%). Por otra parte, entre los grupos de más edad (55-74 años) también aparece como relevante el compromiso medioambiental y de sostenibilidad del alojamiento.
Perfil de cliente y motivaciones
A la vuelta a casa, la satisfacción general de los viajeros es de 4,3 puntos sobre 5 y los factores más bien valorados son la ubicación, el confort, el trato con el responsable del alojamiento, la limpieza, la seguridad o el precio. Tanto es así, que 5 de cada 10 clientes (49,4% de los usuarios encuestados) acaban dejando comentarios online sobre su estancia y en un 95% de los casos se trata de comentarios positivos. Este valor es bastante superior al de 2019, que se situó en un 40,4%.
Si consideramos conjuntamente los mensajes sobre el alojamiento, tanto si son del encuestado como si se emitieron por sus acompañantes, el 60,3% de las experiencias de alojamiento en una VUT acabó con la emisión de un mensaje. Es decir, una de cada dos utilizaciones de VUT va a verse reflejada en las webs, redes sociales o plataformas. Se observa una tendencia creciente, ya que en el informe de 2019 solo el 50,2% de las estancias en VUT derivó en un comentario online.
Los datos objetivos del estudio no hacen más que confirmar una tendencia creciente en el sector, especializado en acoger clientes de un marcado perfil familiar. En este sentido, los problemas entre usuarios de VUT y comunidades de vecinos se reduce prácticamente a la categoría de anécdota. Preguntados por este extremo, un 98,2% de los viajeros niega la existencia de problemas con los vecinos durante su estancia.
Utilización de webs especializadas en alojamientos vacacionales
Un 76,6% de los encuestados confirma haber hecho la reserva en una web o app especializadas en alquiler vacacional o agencia de viajes online (Vrbo, Booking, Airbnb, Tripadvisor). En segundo lugar (32%), los clientes llegaron a esa VUT a través de la recomendación de una persona conocida y la utilización anterior de esa VUT (29,3%).
Como novedad en esta edición del Observatorio de la vivienda turística en España se preguntó a los encuestados el grado de satisfacción con la principal plataforma app o web utilizada, que se sitúa en 4,20 en una escala de 1 a 5.
Impacto económico
El impacto económico de los viajeros españoles alojados en VUT fue de 20.388 millones de euros en 2022, según datos recogidos en el Observatorio de la Vivienda Turística en España. La cifra multiplica casi por cinco el impacto económico de 2019. El gasto directo de alquiler representa un 19,1% del total (4.660 millones de euros), mientras que el gasto en la estancia es de cerca de 16.000 millones de euros.
El gasto en alquiler de la vivienda durante el tiempo de estancia en el alojamiento es de 567,9 euros, un 12,9% superior al de 2019. Alojarse en una VUT cuesta por persona durante todo el periodo 177,3 euros (45,7 euros por persona y noche).
Los gastos de estancia (gastos fuera de la vivienda) de todos los alojados en una VUT ascienden a 2.399,2 euros, cifra notablemente superior a la que se obtuvo en 2019 (1.588,9 euros). Los gastos de estancia por persona durante toda la estancia se sitúan en 598,5 euros, una cifra también sustancialmente superior a la de 2019 que alcanzaba los 412 euros.
El gasto de estancia por persona y noche pasa a ser 139,5 euros, mayor que el de 2019 (102,1 euros). Teniendo en cuenta las diferencias por género y grupos de edad, observamos que el gasto total de estancia es superior para los hombres y los de edades entre 45 y 74 años.
En este sentido, las compras y servicios se llevan el 54% del gasto de la estancia del viajero y en la mayoría de los casos (63,1%) se trata de compras en el barrio o en comercios de proximidad. El resto del gasto se reparte principalmente entre actividades culturales (19,4%), excursiones (18,7%) y ocio nocturno (7%).
Analizando los datos de impacto económico por reserva, el gasto medio se ha disparado un 41,8% en los últimos años, pasando de los 2.092 euros de 2019 a los 2.967 euros de este pasado año.
Las cifras demuestran con contundencia la importancia del sector para la generación de riqueza y actividad económica, así como la incidencia en las ciudades, comercios y negocios del entorno.
Ubicación de las VUTS y movilidad de los turistas
El 56,27% de los encuestados prefiere alquilar viviendas que se encuentren ubicadas en el centro de los destinos. De hecho, la ubicación de la vivienda en la zona es un factor más importante para el grupo de edad entre 35 y 44 años que para el resto de grupos de edad, especialmente en comparación a los más jóvenes.
La ubicación de la VUT implica que las formas y el tiempo de desplazamiento de los turistas cambien. Los viajeros alojados en el centro se desplazan casi a partes iguales en coche, moto o transporte público (51,7%) y andando, bicicleta o patinete (43,7%). Cuando la VUT se encuentra en las afueras existe una alta dependencia (en un 84,41% de los casos) del coche, la moto o el transporte público.
Grado de integración en el destino turístico
Un indicador sobre la satisfacción con el destino turístico es la valoración que hacen los clientes sobre si durante la experiencia vacacional se sintieron como un vecino más (1 sobre 5) o, al contrario, como un turista (5 sobre 5); entendiendo que en el origen de la vivienda de alquiler turístico está el integrarse y sentirse como una persona más en dicho destino turístico. Este indicador se sitúa en 3,04, una cifra que ha disminuido desde 2019, es decir, los encuestados indican una puntuación más cercana a “Te sentiste como un vecino más” que hace dos años.
Percepción de la oferta de VUT
Como usuario, las cifras de 2022 confirman que es una forma de alojamiento con una alta demanda. Los usuarios esperan que haya una oferta de VUT suficiente en el destino al que quieren ir. Cuando se pregunta por el número de viviendas ofertadas en dicho destino, piensan que esta oferta debería ser algo mayor (3,3 sobre una escala de 5, siendo 5 mayor que el que hay ahora). Opinión que coincide con la que se obtuvo en el informe de 2019.
Esto no está reñido con que los encuestados sean proclives a que haya alguna limitación en cuanto al número máximo de viviendas ofertadas (3,2, en una escala de 5 puntos, siendo 5 totalmente de acuerdo). En consecuencia, opinan que hay margen para que la oferta crezca porque no perciben que se haya alcanzado el número máximo. Sin embargo, no parecen estar de acuerdo en que la VUT se sitúe solo en plantas bajas o primeras plantas (2,6), ya que las expectativas de los usuarios sobre la ubicación deseada de la VUT que quieren contratar no siempre coinciden con este tipo de localización en los edificios en los que se encuentran.
Como propietario, el 60,5% estarían dispuestos a alquilar como VUT una vivienda si la tuviesen en propiedad.
